José Luis Espert grabó un video con explicaciones sobre su vínculo con el empresario Federico “Fred” Machado y el cobro de US$ 200 mil dólares en febrero de 2020, que atribuyó a un trabajo de consultoría para la minera guatemalteca Minas de Pueblo.
Tras las declaraciones de Espert, el dirigente Alberto Asseff, quien compartió con el diputado una alianza política en la precampaña presidencial de 2019, reveló episodios de tensión y contradicciones en aquel vínculo. En diálogo reciente, aseguró que, desde aquel entonces, “llamaba la atención” que Espert se moviera en un avión privado y afirmara con insistencia que iría a Estados Unidos para buscar respaldo financiero.
Según Asseff, el ex candidato liberal presionaba para que UNIR (partido que lideraba) participara del financiamiento formal de aquella campaña. Para él, eso obedecía a las exigencias de quienes aportaban fondos: “Es evidente que necesitaba un partido político… para tener respaldo formal ante la Justicia”, dijo.
El partido de Asseff estuvo ligado a Espert entre febrero y junio de 2019, cuando el gobierno de Mauricio Macri le ofreció integrarse a la alianza de Juntos por el Cambio y se alejó del economista liberal. La retirada de UNIR llevó a Espert a postularse a último momento por otra fuerza política, Unite, con el rosarino José Bonacci a la cabeza. Espert llegó a decir, dos años después, que el avión que -ahora se sabe se lo cedió Federico “Fred” Machado” para esa campaña- se lo había conseguido Unite. Pero también mencionó a UNIR, el partido de Asseff.
Asseff calificó como “una monumental mentira” las versiones actuales del candidato sobre esos vínculos. Cuestionó la actitud de Espert hacia quienes lo acompañaban, a quienes calificaba como “sirvientes” dentro de los partidos que lo respaldaban.
También aludió a transferencias por 200.000 dólares que Espert reconoció haber recibido de una compañía minera vinculada a Machado, y negó que UNIR hubiera tenido participación alguna en esos movimientos financieros.
Finalmente, Asseff dijo no comprender por qué Milei sigue sosteniendo a Espert cuando “todos los actores del gobierno le soltaron la mano” y destacó que la convivencia política con él fue inviable: “Nunca hubo affectio societatis.” Con información de La Nación.